El Teatro San Martín fue escenario de una audiencia pública por el Paseo del Bajo
16 de septiembre de 2016 // En La Nación //
l Teatro General San Martín también fue escenario de una audiencia pública en la que se conocieron los detalles y algunas críticas a uno de los proyectos más ambiciosos para la Capital en los próximos años: el Paseo del Bajo, que será el que complete la circunvalación a la ciudad de Buenos Aires.
La obra, que comenzará fines de este año, demandará una inversión de 650 millones de dólares. «Se analizaron las 27 alternativas que había sobre el proyecto (el primero en 1965), del cual se eligieron los 5 mejores proyectos, del cual se seleccionó uno, que con las optimizaciones que se hicieron sobre ese surgió Paseo del Bajo», explicó Marcelo Palacio, subsecretario de Obras del Ministerio de Desarrollo Urbano y Transporte de la Ciudad.
En la nueva autovía los camiones y micros circularán en una trinchera a la que podrán acceder desde la Autopista Buenos Aires-La Plata, cruzar la zona del centro sin semáforos, e ingresar directamente en el Puerto y en la Terminal de Ómnibus de Retiro. Al costado de la vía exclusiva para vehículos pesados, sobre las avenidas Alicia Moreau de Justo y Madero-Huergo se ubicarán los carriles para tránsito liviano. Habrá cuatro en sentido norte y otros cuatro sentido al sur, separados por un boulevard de uso exclusivo para autos y colectivos de corta distancia.
Marcelo Astorga, de Autopistas Urbanas (AUSA), expuso el proyecto y las características de la obra, y explicó que a la altura de la avenida Córdoba el corredor vial pasará por arriba del triducto pluviocloacal para evitar inconvenientes con esa interferencia.
Según los estudios de flujo de tránsito que se presentaron ayer los viajes se reducen hasta un 75%, con ahorros del orden de 35 minutos en ambas direcciones.
Aunque cuando se conoció el proyecto varios arquitectos y urbanistas criticaron la iniciativa, ayer no se oyeron muchas voces que se opusieran. Si bien había 25 inscriptos para dar opinión hubo varias ausencias. La ex diputada nacional por el kirchnerismo María José Lubertino, que también participó de la audiencia por el plan del Riachuelo y de la de la tarifa del gas, sostuvo que se trata de «una inversión innecesaria seis veces más cara que otras opciones al tiempo que es contraria al Plan urbano ambiental y al Plan para prevenir el cambio climático».
En la audiencia, que apenas se prolongó por dos horas, también hubo representantes de la Unión Tranviarios Automotor que se abstuvieron de opinar sobre las características técnicas del proyecto pero destacaron que obras como ésta mejoran la calidad de vida de los choferes de transporte público. En tanto que la Unión Obrera de la Construcción también tuvo un representante de la seccional Capital que sostuvo que ellos acompañan proyectos como estos que dan trabajo a un rubro que necesita mayor cantidad de puestos laborales y que se reactive la industria.
El gobierno porteño volvió a insistir ayer que trabajará especialmente para evitar los impactos ambientales y de congestión que producirá la obra que, según los cálculos más optimistas, durará tres años.