Basura: el show debe continuar
Comienza en enero el plazo para que la Ciudad de Buenos Aires reduzca los envíos de residuos a los rellenos sanitarios de la provincia de Buenos Aires. Y según se comprometió Mauricio Macri durante una reunión con el gobernador Daniel Scioli, para finales de este mes, se habrá reducido un 10%, un 30% en marzo, un 44% en noviembre y un 78% en junio de 2014.
A no ser que el Ingeniero ahora también sea mago, esto resulta imposible de creer e, incluso, de hacer: en 2012, los/as porteños/as enviamos a los rellenos sanitarios el doble que en 2004, cuando por Ley deberíamos haber reducido un 70%. ¿Cómo hará Macri para, en dos años, superar lo que no cumplió en cinco?
¿Por qué nos miente? ¿Por qué no se hizo eco antes de los reclamos, cuestionamientos y cumplimiento de derechos de los/as porteños/as a un ambiente saludable?
Claro que para Macri es más atractiva la cámara de televisión que andar encargándose de unas bolsas de basura, como si el problema fuera tan simple. La reunión que mantuvieran a fines de noviembre porque a Scioli “se le terminó la paciencia” no fue más que un show mediático en donde todos aprovecharon para jugar (el que creen) su mejor papel: los “presidenciables 2015”.
Y si de marketing electoral hablamos, preparémonos para la inauguración en estos días de una planta MBT de reciclado en la que se podrían tratar unas 1.000 toneladas de residuos por día (el 20% de lo que generan los/as porteños/as) reduciendo la cantidad de basura que termina bajo tierra.
Celebramos la iniciativa. Sin embargo, la solución no es insistir en ampliar los terrenos para mantener la lógica de las últimas tres décadas de enterrar la basura, sistema barato pero sumamente contaminante. Esa metodología ha fracasado. El cierre de diferentes rellenos por contaminación del aire, el agua y el suelo, son ejemplos de la ineficacia del sistema de enterramiento.
Esta planta MBT permite separar los residuos húmedos y secos. Nos parece muy interesante que se incorporen tecnologías y alternativas de tratamiento, pero tenemos que fomentar la separación en origen para que todo el proceso de reciclado sea mucho más efectivo y plantear una estrategia integral en la problemática para generar un cambio de paradigma.
La tecnología ayuda, claro, pero debemos además generar la educación y la concientización previa en la ciudadanía para producir la menor cantidad de residuos; fomentar la separación de los mismos en origen; implementar una recolección diferenciada e inversión en los centros verdes para que no se obligue a la desaparición de los cartoneros por no poder competir con ésta y otras futuras plantas.
De la misma manera que se constituyó una Autoridad Metropolitana del Transporte, con la visión de la Presidenta Cristina Fernández de Kirchner de poner solución a los problemas que aquejan a todos los/as habitantes de la región, tenemos que trabajar en conjunto una nueva concepción para la reducción de basura.